Hace unos días leía en las redes del chef Julio Miralles (ex Grupo El Pradal, Zalacaín o Tatel): “Por fin, los sueños se hacen realidad. Pequeña albacería en Madrid, donde los caracoles, las gallinejas, los callos, las bravas, los huevos fritos, la hueva, la mojama, el pan candeal, los colines, los bocaditos de nata y violetas, el chocolate, la cerveza, vinos, café y cocteles, nos devuelven la sonrisa y la felicidad!!!”…
Obviamente la curiosidad me llevó a mirar donde estaba el nuevo restaurante de mi amigo Julio y al ver que lo tenía al lado de casa no ha quedado otra que ir a probar esos “callos”, ese pan candeal, esos bocaditos de Nata y Violetas…
El chef continuaba: “Gracias al pedazo de profesionales que la vida nos ha juntado en este local mítico de la gastronomía de Madrid!!! Gracias a Saúl y a Fernando. Gracias a Coral y Miguel. A Jaime”, y es que en esta nueva aventura el chef se ha traído a parte del equipo del último restaurante en el que ha trabajado “Tatel” Y dicho esto queda todo explicado, un cuidado local, en uno de los barrios más bonitos de Madrid, donde en unas semanas se podrá estar sentado en su terraza contemplando la preciosa iglesia de Los Jerónimos, a escasos metros del Museo del Prado o el Retiro.
Julio viene con toda la humildad del mundo y recalcándome que no es un restaurantes con pretensiones, que vienen con una oferta de cocina desenfada, humilde, donde quieres que la gente lo pase bien… ¡Y así ha sido! Pero vamos con la comida…
Comenzábamos con uno de esos productos que cuando hay buena materia prima es un disfrute: una Anchoas, en este caso triple 000, una delicia si se suma al pan de Jhon Torres, calentito, y una Mantequilla payesa de Soria…
Acompañamos toda la comida con un rosado Balbás, de la Ribera del Duero, elaborado con Tempranillo destaca por su color rosa asalmonado, lleno de vida y elegancia. Afrutado en nariz, con delicados aromas de frutos rojos que recuerdan a fresa ácida y frambuesa. Ya en la fase gustativa la entrada en boca es amable, agradable al paladar, sedoso y refrescante.
O la Ensaladilla rusa madrileña que acompañan con un colín, una Ensaladilla que ya pasa a ser de mis imprescindibles en Madrid…
Una de las filosofías de este nuevo restaurante es que quieren mostrar parte de los platos emblemáticos de la gastronomía madrileña y que hay más de aquí que un Mollete de Gallinejas, ya casi olvidadas y que formaban parte de nuestras verbenas, al menos así lo recuerdo yo. Un plato muy tradicional, originariamente de gente humilde y que ahora Julio lo enaltece. Las Gallinejas están confitadas y luego fritas muy crujientes y la sirven con un gajo de limón. (En la carta encuentras otros dos Molletes, el de Calamares a la Andaluza o el de Cabeza de Jabalí a la plancha)
Y otro de los imprescindibles son sus Callos, muy delicados y de esos que luego no te sientan mal… Si además te ponen el pan Candeal de John Torres para que «mojes» estás perdido…
Y para terminar este menú tan «castizo» un buen Bacalao, una tajada de Bacalo rebozado «de los de toda la vida» aunque también se puede encontrar un buñuelo de Bacalao con Ajo morado y un toque de Azafrán o el Foie de Bacalao ahumado…
A esta oferta salada habría que añadir algunos Huevos (Huevos fritos con Migas, Huevo frito con Centolla o la Tortilla doblada con Patatas y Cebolleta), algunos Guisos como Los Caracoles o el Rabo de vaca estofada y algunas carnes como la EntreCostilla de vacar rubia, 550 gr. con Chimicurri y Patata frita casera, el Entrecot sin deshuesar 400 gr. o el Steak Tartar.
Y para el momento dulce una delicada Torrija tradicional y un Bocadito de Nata y Violeta (uno de los caramelos más típicos de Madrid). También encontramos la Teja, el Bombón de Qubek o el Garrapiñado…
El principal promotor de este restaurante tiene también una importante marca de Café y eso se nota, el café está seleccionado especialmente para el restaurante.
Una de las cosas que también han puesto en marcha son los Desayunos y las Meriendas. Para los desayunos, nos encontramos los panes y la bollería artesana de John Torres, Sandwich Mixto o Bikini, Bagel de Queso cremoso, unos Huevos Benedict con Espinacas, Frutas con Yogurt o Ensalada de Frutas. En las meriendas encontramos el Croque Monsieur, el Croisant o el Pain au Chocolat…
Yo estoy feliz de tener tan cerquita este restaurante al que le deseo todas las suertes del mundo…
RESTAURANTE QUBEK
Dirección: Calle de Moreto, 7
Zona: Los Jerónimos (Madrid)
Teléfono: 915 479 344